Facundo Jones Huala y Moira Millán absueltxs: Victorias para el pueblo Mapuche

Por Venceremos – 11 diciembre, 2019

El 18 de septiembre de 2017, mientras el país entero aún seguía en vilo por la desaparición de Santiago Maldonado, el juez federal Guido Otranto, de Esquel, ordenó una serie de allanamientos a distintas comunidades mapuches que parecían más destinados a amedrentar a sus integrantes que a recabar pruebas sobre el caso del joven desparecido. Uno de esos allanamientos ocurrió en la Comunidad Vuelta de Río. El operativo realizado por la Policía Federal, según narran lxs propixs miembros de la comunidad, comenzó de madrugada y se llevó a cabo con inusitada violencia: «Las fuerzas federales ingresaron a los domicilios de forma violenta, mantuvieron a las personas precintadas en el piso durante horas, quemaron y robaron cosas sin presencia de ningún funcionario judicial y no encontraron nada vinculado a la investigación de Santiago»- expresó Elizabeth Gómez Alcorta, abogada de Moira Millán. Este hecho motivó que al día siguiente varixs integrantes de esa y otras comunidades se manifestaran frente al Juzgado de Esquel denunciando las arbitrariedades del allanamiento, y aunque el propio juez haya reconocido que las manifestaciones fueron pacíficas, le valió a la weychafe (guerrera) Moira una imputación por ocupación bajo la figura de «coacción doblemente agravada».

Algunos meses antes, precisamente el 27 de junio de 2017, se llevó a cabo otro episodio que a primera vista podría parecer inconexo con el primero, pero que en el fondo responde a la misma política represiva del estado argentino contra el pueblo Mapuche y en favor de los grandes terratenientes nacionales y extranjeros. Ese día el lonko Facundo Jones Huala fue detenido con prisión preventiva debido a una causa iniciada por el estado provincial de Chubut y la poderosa empresa Tierras Sud Argentino, del multimillonario Luciano Benetton, por supuestos intentos de usurpación de tierras ocurridos entre 2015 y 2016. Recordemos que el episodio represivo donde desparece Santiago Maldonado se dio en el marco de una protesta donde se exigía la libertad de Jones Huala.

La semana pasada, en dos hechos que sin duda significan importantes victorias para el pueblo Mapuche, ambxs referentes fueron absueltxs y quedaron libradxs completamente de culpa y cargo por las causas mencionadas (aunque Jones Huala aún continúa preso en Chile debido a una causa que se le tramita en el país vecino, en la que resto de los acusados ya fueron liberados). Estos triunfos sin duda reforzarán la genuina lucha que desde hace siglos el pueblo Mapuche lleva adelante, a ambos lados de la cordillera, por el reconocimiento de sus derechos y por la recuperación de sus territorios ancestrales.

El avasallamiento de derechos, las matanzas y expropiaciones salvajes que el estado argentino ha llevado adelante desde el siglo XIX sobre las comunidades Mapuches han sido sostenidas por todos los gobiernos que han administrado nuestro país a lo largo de su historia. Durante el siglo XXI esta política continúa y se profundiza. Las grandes empresas y los multimillonarios al estilo del italiano Benetton o el británico Joe Lewis cada vez se apropian de mayores extensiones de tierras (y también de los lagos, los ríos, y todos los bienes comunes que quedan atrapados dentro de sus alambrados), mientras las poblaciones originarias reciben cárcel, palos o plomo cuando osan exigir no solo los territorios que por derecho ancestral les pertenece, sino, y sobre todo, cuando se atreven a reclamar esas tierras no para lucrar con ellas, sino para vivir en armonía con su entorno, con su medioambiente, con la naturaleza que nos rodea y nos da vida, bajo una lógica de buen vivir, de equilibrio, de comunidad y de paz. Una lógica que choca de frente con la ambición, el salvajismo y la lógica de muerte y destrucción del capitalismo. Porque en definitiva allá, en el fondo de cada uno de estos conflictos, de estos hechos represivos, es eso lo que está en disputa.

Este accionar belicoso del estado argentino se ha acentuado como nunca durante el gobierno de Cambiemos, con su ministra Patricia Bullrich como abanderada del racismo, la discriminación y la represión a los pueblos originarios, conducta que le valió ser premiada con la presidencia del Pro. Quizás estas absoluciones tengan que ver con la retirada del gobierno macrista. Aunque desde Venceremos tampoco nos hacemos ilusiones con el gobierno entrante, no solo porque los 12 años de Kirchnerismo ya demostraron una defensa acérrima de las políticas extractivistas a pura represión contra campesinos y pueblos originarios, sino además, y principalmente, porque si la disputa no solo es por la tierra, sino además, por la lógica con la que vamos a vivir, ningún gobierno capitalista podrá ofrecer soluciones reales, porque como hemos dicho miles de veces y hoy reafirmamos, del capitalismo solo se puede esperar muerte y destrucción. Será entonces tarea urgente, de todxs quienes queremos un mundo diferente, un mundo donde la lógica sea la vida colectiva y no la ganancia individual, la de unirnos para luchar por ese mundo, que no solo es probable, sino que es el único realmente posible.

________________________

Fuente: Venceremos